lunes, 9 de junio de 2014

MAQUINAR AV

       Los lugares donde tocamos son importantes, dotan de carácter a la música que en ellos se genera y acaban de producirla. A veces el lugar juega en contra, una reverb sobredimensionada, una colocación escénica errónea, etc. pueden arruinarlo todo. No fue el caso del concierto en el Festival Embarrat de Tàrrega.
       Preparé una video instalación que ocupó puntualmente el espacio: los televisores ocupaban los antiguos puestos de trabajo y emitían, a su vez, los espacios vacíos de la industria. Ese loop conceptual estaba en la base de la música que interpreté. Elegí algunos objetos metálicos y con un micro de contacto los sampleé. Inicié, de esta manera, una espiral de sonidos ascendentes y oscuros. (Noté que ninguna música noise puede reproducir el horror del ruido de una fábrica en funcionamiento y de las horas que se alargaron allí.)

Foto: Paloma Sánchez Castaño